Clasificación de los Valores
¿QUE SON LOS VALORES?
Es un tema muy importante y también muy relacionado con la psicología. Estamos viviendo una época donde los valores humanos están siendo menospreciados, y ahora cualquier persona que hable sobre valores, la gente por lo general la considera anticuada o pasada de moda.
Ahora los valores los estamos adoptando a nuestra nueva forma de vivir y a esta sociedad cada día mas liberalista, hoy en día lo que esta de moda, son aquellos valores que nos permitan ser libres, y que nos ayuden a evadir responsabilidades.
Muy probablemente la sociedad y la gente no se dan cuenta que definitivamente los valores “no pueden pasar de moda” y mucho menos se pueden quedar “guardados en el baúl de los recuerdos”, nuestros valores jamás debieron quedarse enterrados, fueron muy importantes en la vida de nuestros abuelos y en la de nuestros padres, también lo deberían de ser para la nuevas generaciones, estos valores a los que me refiero a ellos les dieron una vida ejemplar, llena de respeto, sinceridad, buen comportamiento, amor, sabiduría, generosidad, haciendo una pequeña reflexión puedo decir que tal vez estos no hubieran pasado de moda, nos hubieran y es mas nos seguirían evitando conflictos sociales como guerras, hambre, avaricia, prostitución, enriquecimiento ilícito, tantas y tantas cosas que seguramente han surgido por el poco o nulo conocimiento de los grandiosos valores. Es por eso que debemos de tener conciencia de que todavía estamos a tiempo para que nuestros pequeños tengan una buena guía por parte de nosotros que estamos viendo a que grado han llegado las cosas, es muy importante que desde niños se le valla inculcando y enseñando que hay herramientas valiosas que tiene el ser humano para llevar una vida digna y en armonía, que los preparemos para lo que se avecina, para que se les pueda dar una muy buena preparación sobre valores, no solo deben intervenir los padres, también juegan un papel muy importante los maestros, los cuidadores, el resto de la familia y los psicólogos.
Los pequeños son los únicos que podrán realizar un cambio verdadero en nuestra sociedad.
Es muy triste ver en la calle a niños de entre 8 y 12 años que no conocer lo que es tener valores, que nadie se ha preocupado por ensañárselos, por lo mas mínimo decírselos o nombrarles que son y que beneficio tan grade pueden traer a su vida.
No podemos cerrar los ojos y decir simplemente “son tonterías”, hay que estar consientes de que los valores están en nuestras vida desde hace millones de años, desde que existían los nómadas hasta que llego la tecnología con todo y sus cambios, el hombre siempre ha tenido cosas valiosas, y cosas a las cuales les damas importancia que otras, estoy tratando de decir que los valores a lo largo del tiempo se han ido trasformando dependiendo de las necesidades del ser humano, algunos han desaparecido, otros muchos modificados y otros tantos son completamente nuevos.
Hay valores los cuales nos han acompañado a lo largo de nuestra existencia, son los se enfocan a las costumbres, culturas, religión, los buenos modales y otros mas que son los que van surgió con la modernidad y que por lo general son los que estamos aplicando a nuestra vida actualmente.
Concluyendo puedo decir que los valores entonces son aquello que hace a las cosas buenas e importantes, pero que el hombre las debe de descubrir por su razonamiento.
LOS VALORES BIOLÓGICOS
Este tipo de valores son
inculcados gracias al fomento de tres aspectos muy importantes y son:
ALIMENTACIÓN: Para
nosotros y para cualquier ser humano la educación, es la base de casi todas las
conductas de nosotros y los hábitos saludables también necesitan aprender. Poco
a poco cada familia debe inculcar esto a sus hijos y familia para que desde
pequeños crezcan y gocen de un buen estado y buena calidad de vida. Una
alimentación saludable es uno de los pilares del buen estado y rendimiento escolar.
SALUD
Entendida como
ausencia de enfermedad y como resultado de un equilibrio biológico, mental y
social, la salud ha alcanzado recientemente el rango de derecho fundamental de
las personas.
HIGIENE
El establecimiento de normas de higiene debe iniciarse en cada hogar y sin duda la
prédica de las mismas debe ser hecha con el ejemplo, en base al buen
entendimiento y explicando las razones que se ocultan en las acciones
rutinarias que el niño puede contemplar como inútiles o poco prácticas como
mínimo.
VALOR
ECONÓMICO
Los valores económicos de un bien o servicio ha
desconcertado a los economistas desde el principio de la disciplina. En primer
lugar, los economistas trataron de estimar el valor de un bien a una persona
sola, y extender esta definición a los bienes que pueden ser intercambiados. A
partir de este análisis fue el valor de los conceptos en uso y valor de cambio.
Maximización
de la riqueza predice que una persona va a elegir para obtener el bien o
servicio en el lugar donde sea más barato, cuando el importe entregado es el
menor.
El
valor está vinculado al precio a través del mecanismo de intercambio. Cuando un
economista observa un cambio, dos importantes funciones de valor se revelan: la
de que el comprador y el vendedor. Así como el comprador revela lo que está
dispuesto a pagar por una cierta cantidad de un bien, también lo hace el
vendedor revelando lo que le cuesta a renunciar a lo bueno.
Información
adicional acerca del valor se obtiene por la velocidad a la que las
transacciones se realizan, diciendo a los observadores el grado en que la
compra de la mercancía tiene un valor en el tiempo.
Dicho de otra manera, el
valor es la cantidad de un objeto deseado o la condición de valor respecto a
otros objetos o condiciones. Los valores económicos se
expresan como “cuánto” de una condición deseable o materias primas, pudiera ser entregado a cambio de alguna otra
condición deseada o mercancía. Entre las escuelas rivales de la teoría
económica existen diferentes indicadores para la evaluación del valor y la
métrica son objeto de una “teoría del valor”. Las teorías de valor son una gran
parte de las diferencias y desacuerdos entre las diversas escuelas de economía.
VALORES
MORALES
Los
Valores Morales son todas las cosas que
proveen a las personas a defender y crecer en su dignidad. Son desarrollados y
perfeccionados por cada persona a través de su experiencia.
Por
lo general los valores morales perfeccionan al hombre, en cuanto a las acciones
buenas que realice, como: vivir de manera honesta, ser sincero, y ser
bondadoso, entre otras.
Aun
así, escoger los valores morales es una decisión netamente de la persona y no
está obligado a ejecutarlo, es decir, cada persona es dueña de sus elecciones,
y está en su juicio decidir si opta por ellos o no, sin embargo elegir y tomar
acción sobre estos, tendrá un efecto de calidad extra en cada persona.
Cuáles son
los valores morales:
El
Amor: El
amor es considerado como la unión de expresiones y actitudes importantes y
desinteresadas, que se reflejan entre las personas capaces de desarrollar
virtudes emocionales.
El Agradecimiento:
La gratitud, agradecimiento, gratitud o aprecio es un sentimiento, del corazón o de actitud en el reconocimiento de un beneficio que se ha recibido o va a recibir
El Respeto:
Significa
mostrar respecto y el aprecio por el valor de alguien o de algo, incluyendo el
honor y la estima. Esto incluye el respeto por uno mismo, respeto por los
derechos y la dignidad de todas las personas y el respeto por el medio ambiente
que sustenta la vida. El respeto nos impide lastimar a lo que debemos valorar.
La Amistad: La amistad es una relación entre dos personas que tienen afecto mutuo el uno al otro. La amistad y de convivencia son considerados como atraviesa a través de un mismo continuo. El estudio de la amistad se incluye en los campos de la sociología, la psicología social, la antropología, la filosofía y la zoología. Diversas teorías académicas de amistad que se han propuesto, incluyendo la teoría del intercambio social, teoría de la equidad, la dialéctica relacional y estilos de apego.
La Bondad: Es el estado o cualidad de ser bueno, sobre todo moralmente bueno o beneficioso. En cierto sentido, es la cualidad de tener calidad. En otras palabras en el campo de texto de la bondad: beneficiosos, remunerado, útil, útil, provechoso.
La Dignidad:La dignidad es un término que se utiliza en las discusiones morales, éticos y políticos para significar que un ser tiene un derecho innato de respeto y trato ético.
LA TOLERANCIA
La
tolerancia es la expresión más clara del respeto por los demás, y como tal es
un valor fundamental para la convivencia pacífica entre las personas. Tiene que
ver con el reconocimiento de los otros como seres humanos, con derecho a ser
aceptados en su individualidad y su diferencia. El que es tolerante sabe que si
alguien es de una raza distinta de la suya o proviene de otro país, otra
cultura, otra clase social, o piensa distinto de él, no por ello es su rival o
su enemigo.
VALORES INTELECTUALES
Serian todos
aquellos rasgos, fenómenos y procesos que tienen una significación socialmente
positiva en el establecimiento y desarrollo de la capacidad de reflexión y
creatividad del profesional .
Fin Objetivo: Verdad
Fin Subjetivo: Sabiduría
Actividades: Abstracción y Construcción
Preponderancia: Razón
Necesidad que satisface: Autorrealización
Tipo de Persona: Íntegra
Ciencia que lo estudio: Lógica
La Objetividad es el valor de ver el mundo como es, y no como queremos que sea.
La objetividad de un sujeto está relacionada con planteamientos morales.
La encontramos habitualmente formulada en términos de neutralidad, imparcialidad o impersonalidad.
Para ser objetivo, a la hora de expresar un juicio, el sujeto debe abandonar todo aquello que le es propio (ideas, creencias o preferencias personales) para alcanzar la universalidad.
Es dar tu opinión o ver las cosas desde un punto de vista general.
Podemos definir la capacidad de concentración como el proceso en el que se inhibe las tomas de información irrelevante y se focaliza en las tomas de información hacia lo relevante.
La concentración es la fijación de la mente en un soporte, la capacidad de que la mente se estabilice en el objeto que la ocupa. Así como toda fuerza canalizada gana en potencia, también la mente canalizada obtiene mayor penetración y hace posible una comprensión más enriquecedora y profunda.
VALORES RELIGIOSOS
Son y deben ser los más importantes, porque se refieren a la dimensión decisiva de la existencia humana: su relación temporal y eterna con Dios y con los otros seres humanos. Luego siguen los valores del espíritu, que incluyen la disciplina mental para acceder a la verdad, para “retenerla” con una buena memoria y expresarla de modo claro y honesto; la fuerza de voluntad, que permite comprometerse en el trabajo, en el estudio o en las mil actividades de la vida familiar; la solidaridad, que lleva a los hombres a unir sus esfuerzos en la construcción de un mundo más acogedor; la justicia, que permite no sólo respetar los acuerdos o los derechos ajenos, sino promoverlos allí donde todavía son pisoteados... La lista podría ser muy larga, pero da una idea de lo urgente que es elaborar buenos programas de formación en los valores.
VALORES PARA PROFESORES
Los valores que ayudan a todo educador a superarse personal y profesionalmente, para convertir el aula en una verdadera escuela de valores.
Una de las actividades humanas con mayor trascendencia e impacto en la sociedad es, sin lugar a dudas, la labor docente. Por esto, es importante considerar que toda persona con las funciones de un profesor, tiene una responsabilidad que va más allá de transmitir únicamente conocimientos.
El maestro o instructor que ha logrado influir positivamente en las personas bajo su tutela -sin importar la edad de los alumnos o el área de desempeño-, seguramente debe el éxito de su trabajo, a la calidad humana que vive y hace vivir dentro y fuera del aula; desgraciadamente, el amplio bagaje cultural y de conocimientos muchas veces es insuficiente para realizar una labor educativa eficaz.
Objetivamente hablando, el profesor se encuentra en un escaparate donde su auditorio está atento al más mínimo detalle de su personalidad, por lo cual, tiene una inmejorable posición para lograr un cambio favorable en la vida de los demás.
Además de la elocuencia, el grado de especialización y el manejo de las herramientas didácticas, todo educador debe considerar como indispensable vivir los siguientes valores:
• LA SUPERACIÓN
Posiblemente una de las palabras que más se utilizan en un centro
educativo, es precisamente el superarse, y cada vez que un profesor dedica
parte de su tiempo para lograr este cometido, todo su esfuerzo se traduce en
acciones concretas, por ejemplo, aprende e implementa nuevas técnicas de
enseñanza o utiliza el propio ingenio para el mismo fin; comenta temas de
actualidad relacionados con su materia; comparte experiencias personales;
sugiere y ofrece puntos de vista respecto a las lecturas, películas,
espectáculos; posee conocimientos de historia y cultura general; busca
relacionarse con las nuevas tecnologías: internet, e-mail y el chat para
orientar sobre sus riesgos y beneficios... podría decirse que en su clase
siempre hay algo nuevo que comentar.
El aspecto humano es un factor que no debe descuidarse, al menos deben tenerse nociones básicas de la filosofía del hombre, ética, relaciones humanas, etapas físicas y psicológicas en el desarrollo de los seres humanos, caracterología. como herramientas indispensables.
La superación comprende el esfuerzo personal por mejorar en hábitos y costumbres, en otras palabras: conocer y vivir los valores humanos.
El aspecto humano es un factor que no debe descuidarse, al menos deben tenerse nociones básicas de la filosofía del hombre, ética, relaciones humanas, etapas físicas y psicológicas en el desarrollo de los seres humanos, caracterología. como herramientas indispensables.
La superación comprende el esfuerzo personal por mejorar en hábitos y costumbres, en otras palabras: conocer y vivir los valores humanos.
• LA EMPATÍA
Aunque la vocación para enseñar supone un genuino interés por los demás, son acciones concretas las que permiten vivir mejor este valor:
Se demuestra empatía al prestar la misma atención a todos los alumnos, exista o no afinidad; dedicando un par de minutos a charlar individualmente con cada uno de los discípulos, para conocer mejor el motivo de su inquietud, desgano, indiferencia o bajo rendimiento; ofrecer la ayuda, medios o herramientas necesarias para mejorar su desempeño, calidad humana o integración al grupo.
Por otra parte, las muestras de empatía pueden ser tan simples como sonreír, felicitar por el esfuerzo continuo o un trabajo bien realizado; con palabras de aliento para quien tiene mayores dificultades; reforzando las actitudes positivas; poner al corriente a quien estuvo enfermo, implementando las estrategias y elementos necesarios para lograr un mejor aprendizaje.
Lo mismo sucede al corregir con serenidad y comprensión, y en la medida de lo posible, sin poner en evidencia delante de los demás; controlando la impaciencia, el enojo y hasta el mal humor provocado por circunstancias ajenas y personales.
La empatía exige un esfuerzo cotidiano por superar el propio estado de ánimo, la poca afinidad con determinadas personas, las preocupaciones, el cansancio y otros tantos inconvenientes que afectan a los seres humanos. Por tanto, este valor permite hacer un trabajo con mejor calidad profesional y humana al mismo tiempo.
• LA COHERENCIA
Todo profesor representa autoridad, disciplina, orden, dedicación y verdadero interés por las personas, y partiendo de esta base, el ser coherente supone trasladar a la vida personal las mismas actitudes que se exigen en el salón de clase.
Por ejemplo, es fácil pedir que los alumnos cumplan con sus trabajos a tiempo, completos, en orden y con pulcritud, pero esto exige revisar, corregir, hacer observaciones por escrito y entregar resultados con la misma puntualidad solicitada.
Lo mismo sucede con el vocabulario, las posturas, el arreglo personal, hábitos de higiene y la relación personal que se vive con los demás: amable, respetuosa, comprensiva... La actitud que toman los alumnos a la hora de clase, muchas veces es el reflejo de la personalidad del profesor; si se desea que maduren, sean responsables y educados, el ejemplo es fundamental.
De igual forma, ser coherentes comprende el cumplir con las normas establecidas por la institución: planeación, elaboración de material, seguimiento de un programa, cubrir objetivos según el calendario, participar en las actividades extraescolares, etc.
Recordemos que para exigir a los demás, es indispensable tener disciplina en la vida personal y profesional.
• LA SENCILLEZ
Posiblemente uno de los valores que mejor decora y ennoblece el trabajo de un educador es la sencillez, porque permite reconocer en su labor una oportunidad de servicio y no una posición de privilegio para tener autoridad o un estupendo escenario para hacer gala de conocimientos.
Las circunstancias ponen al profesor delante de personas que necesitan de su intervención, pero la soberbia y el egocentrismo dificultan la comunicación y el correcto aprovechamiento. Lo mejor es impartir la cátedra con la intención de aplicar toda la experiencia, conocimientos y recursos buscando un mejor aprendizaje.
Conviene aceptar que el conocimiento propio tiene un límite y se vive en constante actualización; es muy significativo y otorga mucho prestigio, reconocer que algún aspecto del tema se desconoce, pedir oportunidad para investigar y tratar el asunto en una sesión posterior. Es preferible esto, a ser sorprendido mintiendo.
En este mismo renglón, conviene encontrar en las críticas una oportunidad para mejorar personalmente, así como aceptar los errores personales, rectificar y pedir disculpas, si es el caso.
La sencillez también se manifiesta al compartir con otros profesores la experiencia docente, dando consejos y sugerencias que faciliten a los demás su labor. De la misma manera, la docilidad con que se sigan las indicaciones institucionales, la apertura a nuevos procedimientos o la colaboración en cualquiera de las actividades, son rasgos significativos de apertura y disponibilidad.
• LA LEALTAD
Desafortunadamente la falta de lealtad es una situación que se vive en todos los ámbitos sociales: murmuración, crítica, difamación y falta de honestidad.
Ser leal a una institución significa una completa adhesión a sus normativas, respeto por los directivos y trabajo en equipo con los colegas. Por supuesto que no siempre se estará de acuerdo con todo, pero habrá que distinguir la fuente de inconformidad para actuar acertadamente: si personalmente incomoda u objetivamente es un caso que requiere mayor estudio.
Lo primero y fundamental es manifestar las inquietudes con las personas adecuadas. Falta a la lealtad quien desahoga críticas e inconformidades a espaldas de los directivos con los compañeros, los amigos, padres de familia e incluso con los alumnos. Sea en forma individual o en conjunto con otras personas, estas actitudes son totalmente incorrectas.
Es obligación guardar toda confidencia respecto a las políticas y estrategias; movimientos del personal; decisiones directivas; situaciones personales de maestros y alumnos, a menos que afecten considerablemente la imagen y prestigio de la institución. No está de más recalcar que todo, absolutamente todo, debe consultarse con las personas indicadas para resolver cualquier género de circunstancias.
• LA ALEGRÍA
Tal vez una de las figuras más atractivas es la del profesor entusiasta, siempre con una sonrisa dibujada, optimista, emprendedor; quien difícilmente se enoja, pero a la vez es estricto y exigente; disponible al diálogo; bromista pero respetuoso; capaz de comprender y dar un buen consejo...
Esta personalidad no es extraña ni ajena, pero a nadie se le ocurre pensar si tiene problemas, carencias o dificultades personales, mucho menos, preguntarse cual es la fuente de su alegría y serenidad.
Para lograr vivir este valor hace falta esfuerzo y madurez, es decir, dejar los problemas personales para el momento y lugar oportuno, nunca para desquitarse en el aula; concentrar toda la atención en lo que se hace: preparación, elaboración, exposición y conducción de la clase; buscar como ayudar a los demás a solucionar los problemas propios del aprendizaje; planear actividades diferentes: recorrido cultural, película, asistir a un evento, etc., o dedicar unos momentos a charlar con los colegas.
Si observamos con cuidado, la alegría proviene de una actitud de servicio, otorgando el tiempo necesario y los propios conocimientos para el beneficio ajeno. La satisfacción de cumplir con el deber siempre tendrá sus frutos, muchas veces sin aplausos, pero si con las muestras de aprecio, el agradecimiento de un solo alumno o simplemente con los excelentes resultados obtenidos.
No pensemos que es profesor sólo aquel que imparte clases a niños o jóvenes, también quienes participan en los centros de capacitación de las empresas y las instituciones con cursos especializados, por mencionar algunos.
La sociedad actual puede recibir un gran beneficio a través de profesores especializados en cualquier área del conocimiento, la técnica o la cultura, pero también hace falta ser un verdadero apoyo familiar, líder y ejemplo de integridad, honestidad, profesionalismo y de valores humanos.